Claude Nicolas Ledoux.

 A caballo entre dos épocas…

Emil Kaufmann, le señalaba como uno de los precursores de la arquitectura moderna. Hoy en día se le considera un utopista y un referente  para los arquitectos postmodernos.

“Je sçais ce qu’il en coûte pour établir une nouvelle religión”

“sé lo que cuesta establecer una nueva religión”

Claude Nicolas Ledoux (Dormans, 21 de marzo de 1736 — París, 18 de noviembre ), de origen humilde, recibió una educación religiosa y un tanto clasista.Su pasión por el dibujo le hizo interesarse por la arquitectura que estudiaría en la «École des Arts» de París, de la mano de Blondel, a la par que trabajaba haciendo grabados a las órdenes de Piranesi para costearse los estudios. Y es que la vida de un universitario sin recursos nunca fue sencilla. Sin embargo no finalizó una formación habitual, pronto el joven Ledoux  se apartaría de los dogmatismos del clasicismo francés y tampoco realizaría el famoso ” viaje de estudios a Italia”,algo así  como  el erasmus  hoy en día, casi obligatorio.

Su carrera comenzó a despegar al conseguir  trabajo en los principales despachos de moda de la época lo que le permitió codearse con “la créme de la créme” de la sociedad francesa y  empezó a recibir encargos de la alta sociedad parisina convirtiéndose en el protegido de Madame du Barry, la mismísima amante del rey.Y es que parece ser que para conseguir la fama uno aparte de talento tiene que tener contactos, ahora y siempre.Y si están forrados mejor que mejor, Ledoux sabía lo que se hacía.

(caracterización de Madame du Barry en Marie Antoinette de Sofia Coppola)

   

    

    

    

Bajo envolturas prestadas por el pasado, un espíritu completamente nuevo…

Ledoux siempre estaría a caballo entre dos épocas, la heterónoma y la autónoma post-revolucionaria, saltando de una a otra agilmente.

heterónomo, ma:
 Dicho de una persona que está sometida a un poder ajeno que le impide el libre desarrollo de su naturaleza

En sus inicios fue fiel a la idea barroca de la unidad en la  configuración de los cuerpos  para su fusión en un todo. En el Hotel de Montmorency (1772) marca este concepto tanto en planta, con la disposición tradicional entre salón y vestíbulo, como en fachada;  a través de una gradación en base al rango y la  disolución del edificio en sentido ascendente.

Emplearía con frecuencia las formas antiguas, aunque en algunos de sus proyecto las evite  completamente,  introduciendo  una transformación de la forma global clásico-barroca.En el Pabellón de Louveciennes para  la Condesa du Barry (1771)  elimina las alas de la forma cúbica exterior lo cual contrasta con el interior y su tradicional planta.

Lucha entre un mundo que perece y un mundo que nace, principios contrapuestos que conviven en el Hotel Thélusson (1778) de concepción barroca. Un potente edificio principal del que parten en curva hacia el jardín las bajas construcciones secundarias. Sin embargo la planta se simplifica, se suprimen las curvas, el grupo salón-vestíbulo no queda realzado y se reduce la plasticidad y el ornamento.

 Finalmente rompe con el concepto de unidad barroco, en la que la supresión de una parte acabaría con la totalidad del conjunto, introduciendo una multiplicidad de partes desligadas unidas por pasos. La Ciudad ideal de Chaux (1774-79) será el máximo exponente de esta fractura recurriendo al sistema de pabellones. También desde el punto de vista urbanístico esta ciudad abandona la actitud barroca y renacentista que sometía la naturaleza a intenciones artísticas y es que su trazado respondiendo a razones prácticas potencia su función de  punto nodal de tráfico. El  planeamiento sobrio y objetivo y la composición de elementos sustituye la teatralidad y el crecimiento orgánico propios del barroco.

La Revolución…

Cuando la Revolución estalla en 1789, su rica clientela toma el camino de la emigración o perece bajo la guillotina.Y es que mientras el pueblo se moría de hambre, ellos vivían rodeados de lujos y glamour así que no fue de extrañar  que rodaran cabezas.

Ledoux vió su carrera y sus proyectos parados incluso vió los primeros golpes de piqueta. Símbolo pese a él de la opresión fiscal, gracias a sus impopulares barriéres de Paris. Ledoux, que había conseguido una bonita fortuna y llevaba un alto tren de vida, fue arrestado el 29 de noviembre de 1793 por el comité revolucionario del Faubourg du Nord y llevado a la Prisión de la Force. Fue acusado de haber trabajado para Madame de du Barry y de no haber aplaudido sinceramente en la ejecución de Luis XVI.

Pero Ledoux no perdió el tiempo durante su cautiverio, escribió e incluso le hizo un proyecto a su compañero de celda, eso es productividad.  Gracias a la intervención de un contacto profesional (¿he dicho ya lo importante que son los contactos?) evitó la guillotina.

Ledoux fue liberado, dejó de construir y se dedicó a preparar la publicación de su obra completa «L’Architecture considérée sous le rapport de l’art, des mœurs et de la législation» (1804). Evolucionó hacia una arquitectura siempre más detallada, colosal, con amplias paredes cada vez más lisas, con huecos cada vez más y más raros…

La Autonomía Arquitectónica…

Ledoux se distingue de los arquitectos de la revolución por su afán de tener en cuenta la voluntad de la época sirviéndose de medios estrictamente arquitectónicos.El rasgo revolucionario y postrevolucionario se distingue por la creciente utilización de bloques elevándose unos sobre otros.

Desarrolló la potencia de las masas y experimentó con la fuerza de las formas. El cubo en la Casa Jarnac, la pirámide en la Casa leñador, el cilindro en la Barrière de la villette y la esfera en la Casa del jardinero.

Consideraba las formas elementales signos dotados de un significado trascendental.Así pues el cubo de la Casa de la paz pretendía ser un símbolo de estabilidad y justicia.

El arquitecto quería eregir monumentos dignos a la fé, a la moralidad, al derecho, a las nuevas ideas de fraternidad, a la armonía, a la humanidad…Los edificios debían servir a las grandes ideas en su  forma pura con su arquitectura autónoma. Separa las atmósferas, introduce la distancia entre lo espiritual y lo mundano en la planta  de la iglesia de chaux dónde utiliza un cuadrado dividido en 9. La dominación de las líneas horizontales y altos muros sin aberturas que aportan sensación de paz.

Universalidad, cosmopolitismo, igualdad de derechos, la habitabilidad vence al valor decorativo. Ledoux pretende favorecer el acceso de las grandes multitudes a un buen nivel de vida. Concibiría pues el  Teatro de besançon (1784) como una comunión de todos los espectadores introduciendo el patio de butacas para el pueblo que anteriormente permanecía de pie mientras los nobles eran los únicos que podían sentarse.También inventaría la tipología de edificios con cocina comunitaria, aquellos que hayáis vivido en una residencia sabéis de lo que hablo, que mejoraba la funcionalidad y habitabilidad de las viviendas populares de la época.

Ledoux, personaje controvertido. Algunos lo consideraron un loco,“Une espèce de fou en architecture”. Quatremère de Quincy le acusó de haber sometido la «arquitectura a géneros de tortura» y en 1832, Victor Hugo se preguntaba: «¿Acaso hemos llegado a un extremo tal de miseria tal que tengamos que admirar las barreras de París?”.

Sin embargo,Emil Kaufmann deja muy claro en su obra que en su opinión es el pionero que pone en crisis la arcaica arquitectura existente. Su legado sería un referente para sus predecesores, desde  DURAND, SHINKEL,  KLENZE, SEMPER, BERLAGE , LOOS hasta LE CORBUSIER.